El Renault Zoe e-Sport que la marca del rombo exhibe en Ginebra sólo comparte el nombre y algo del diseño con el compacto eléctrico en venta desde hace unos años en Europa y Chile.
Renault ha querido plasmar en este auto todo lo que ha aprendido en los tres años que lleva compitiendo en la Fórmula E, y es así como consigue unas muy respetables cifras de performance: 462 caballos de fuerza, 210 km/h de velocidad máxima (que consigue en 10 segundos) y un increíble crono de 3,2 segundos en el 0-100.
El Zoe e-Sport tiene un chasis tubular sobre el cual se han puesto paneles de kevlar y una carrocería de fibra de carbono, para un peso total de 1.460 kilos.
Muestra un ancho de vías mayor al común para dar espacio a las ruedas de 20” (245/35 R20), un despeje rebajado, suspensiones deportivas con amortiguadores Öhlins de competición y grandes frenos de disco.
Utiliza dos motores eléctricos, uno sobre cada eje, consiguiendo que la tracción sea en las cuatro ruedas, algo que se puede gestionar para enviar más par a un eje que al otro, según la preferencia del conductor.
También cuenta con dos baterías, una junto a cada motor, para así repartir mejor el peso. La capacidad de almacenamiento es de 40 kWh.
Por dentro destacan las butacas Recaro con cinturones de competición, un volante rectangular y un panel de instrumentos digital.
La estética de este auto se asemeja mucho al Zoe convencional, pero vitaminizado y lleno de elementos aerodinámicos, como profundas tomas de aire laterales, un spolier trasero y un difusor de grandes proporciones.
Destaca el color azul satinado que replica el utilizado por el equipo Renault e-Dams de la Fórmula E, con elementos en el clásico amarillo de Renault Sport.
Renault Zoe e-Sport Concept 2017