En su primer Auto Show como marca oficial del Grupo PSA, Opel sacó la cara por la filial francesa con una batería de novedades, aunque todas ellas versiones especiales de modelos ya presentados.
El nuevo Insignia sigue dando que hablar, esta vez con dos versiones muy esperadas: el deportivo GSi y el aventurero Country Tourer, con los que se completa una gama de cuatro versiones: Grand Sport (sedán), GSi (deportivo), Sport Tourer (station wagon) y Country Tourer (crossover).
Vamos a este último. Se trata de una variante enfocada en el outdoors construida sobre el Sport Tourer presentado en Ginebra 2017. Muestra algunos rasgos propios de este tipo de modelos, como protecciones plásticas sobre los arcos de rueda y la zona baja del auto, así como placas cromadas en las puntas.
La marca indica que le incluyó un cubrecárter cromado, una doble salida de escape y cuenta con 20 mm de mayor despeje al piso (120 mm). Asimismo, en lugar de un diferencial trasero convencional, se le agregó un diferencial con dos embragues multidisco controlados electrónicamente. La tracción es integral con reparto vectorial del par y la caja es automática de ocho velocidades.
El Insignia Country Tourer incluye bajo el capó dos opciones diésel y una gasolinera. Entre los primeros está el 2.0 CDTi con 170 y 210 Hp, mientras que el gasolinero es el biturbo 2.0 litros del GSi, con 260 Hp.
La practicidad está dada por un portalón trasero con control de movimiento, barras en el techo, llantas de 18”, sistema de conducción FlexRide, sistema Opel Eye, luces Full LED, climatizador digital bizona, el sistema IntelliLink R4.0, entre lo principal.
